A medida que la conferencia climática de las Naciones Unidas en Dubai avanza en su primera semana de diálogos, un informe alarmante de Copernicus, el Servicio de Cambio Climático de Europa, revela que 2023 podría convertirse en el año más caluroso de la historia.
Con una temperatura promedio diaria en noviembre de 14.22 grados Celsius, superando el récord anterior de 2020 por 0.32 grados, 2023 marca seis meses consecutivos estableciendo nuevos récords de temperatura.
Samantha Burgess, vicedirectora del servicio, destaca la gravedad de esta tendencia: “Se han batido nuevos récords durante seis meses consecutivos y dos estaciones. Este extraordinario noviembre significa que 2023 será el año más caliente desde que comenzaron los registros”.
El informe de Copernicus llega en un momento crítico, justo cuando los negociadores en Dubai están concluyendo su primera semana de conversaciones en la COP28. Las sesiones del miércoles se centrarán en el transporte, el segundo sector con mayores emisiones de dióxido de carbono. Se discutirá sobre la construcción de infraestructura de carga para vehículos eléctricos y la descarbonización del transporte de mercancías en áreas urbanas.
A pesar del crecimiento acelerado de los vehículos eléctricos en algunos países, el petróleo aún representa casi el 91% de la energía utilizada en el sector del transporte, según la Agencia Internacional de Energía. Este sector incluye industrias difíciles de descarbonizar como la aviación y el transporte marítimo, donde la reducción de emisiones requerirá un aumento considerable en la producción de combustibles sostenibles para aviones y alternativas como el hidrógeno para barcos.
Los registros de Copernicus se remontan a 1940, mientras que los cálculos del gobierno de los Estados Unidos datan de 1850. A través de métodos como núcleos de hielo, anillos de árboles y corales, los científicos estiman que esta es la década más cálida en la Tierra en unos 125,000 años, mucho antes del inicio de la civilización humana. Además, los últimos meses han sido los más calurosos de la última década.
Los científicos atribuyen este récord continuo de seis meses a dos factores principales: el cambio climático provocado por el hombre debido a la quema de carbón, petróleo y gas, y el ciclo natural de El Niño-La Niña.
El programa espacial europeo, Copernicus, alerta que la temperatura media mundial entre enero y noviembre de este año es la más alta desde que se tienen registros. Con un otoño boreal que también establece récords de calor y la temperatura de los mares alcanzando niveles sin precedentes en noviembre, Carlo Buontempo, director de C3S, advierte: “Mientras las concentraciones de gases de efecto invernadero sigan aumentando, no podemos esperar resultados diferentes a los vistos este año.”
“La temperatura seguirá creciendo y, con ella, los efectos de las olas de calor y las sequías. Alcanzar el cero neto lo antes posible es una forma efectiva de gestionar nuestros riesgos climáticos”, concluye Buontempo, subrayando la urgencia de acciones climáticas significativas.
FUENTE: Copernicus